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Recursos Naturales, Fiscalidad, Diversificación y Reforma Tributaria en América Latina

Publicado en Diario 1, Martes 30 de Junio, 2015

Carlos Monge

Publicado: 2015-07-07

Un reciente estudio de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) confirma que a lo largo del llamado Súper Ciclo (última década de alta demanda y precios por los minerales y los hidrocarburos) el peso relativo de estos productos como parte del PBI y de los ingresos de los países de la región creció de manera importante. Pero también nos muestra comportamientos diferenciados por sectores y por países respecto de la capacidad de los estados de capturar parte de la renta generada por estas actividades.

Así por ejemplo, se mantuvo o aumentó la parte dela renta de los hidrocarburos capturada por los Estados, destacando Bolivia que pasó de capturar menos del 30% a capturar más del 73% de la renta petrolera y gasífera generada en ese país.

En cambio, mientras en algunos países como Argentina, Brasil, y Chile aumentó la parte de la renta minera capturada por el estado, en como México y Colombia esa parte más bien cayó.

En el Perú, entre el 2000 y el 2013 y al igual que en el resto de la región, crece el peso de los hidrocarburos de 0.5 a 1.4% del PBI nacional y del 3.2 al 7.1% de los ingresos fiscales totales, respectivamente. La parte de la renta total generada capturada por el país pasó de 35.0 a 53.7% en esos mismos años.

En el caso de los minerales sucede lo mismo en canto a su peso en el PBI y en los ingresos fiscales totales. Pero la proporción de la renta minera total capturada por el cayo de manera significativa, pasando del 43 al 15% del total en esos mismos años. La tendencia es similar a la de varios otros países de la región, pero en Bolivia, Colombia y México la caída es aún peor.

¿Porque en la mayor parte de los países aumento la capacidad del estado de capturar renta de los hidrocarburos mientras que en un número importante de países no hubo tal capacidad de capturar renta minera? Con la excepción de Chile que tiene a la estatal CODELCO en el sector del cobre, la respuesta parece estar en la existencia de empresas estatales fuertes y en la decisión política de controlar el destino último de la energía que se extrae, sea para exportarla, o consumirla, con o sin valor agregado.

Hacia adelante, en un escenario de precios petroleros, gasíferos y mineros más bajos que los del Súper Ciclo, es claro que ni la minería ni los hidrocarburos tendrán el peso que han tenido en el PBI y los ingresos fiscales. En consecuencia, se pone a la orden del día –en toda la región- el debate sobre dos temas que requieren ser resueltos de manera simultánea y convergente: diversificación productiva y reforma tributaria.


Escrito por

Carlos Monge

Antropólogo e Historiador. Fanático del Alianza Lima y socialista empedernido. Enamorado de Leda, Lucía, Camilo, Frida y León.


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